viernes, 24 de julio de 2015

UN POCO DE MEDIO AMBIENTE


Ahora que nos encontramos en plena estación estival, la más deseada por todos, cabe decir de ella que resulta ideal para acercarnos, relajarnos y reencontrarnos con el medio ambiente. Sólo necesitamos decidirnos y elegir entre  playa o campo, incluso hay otra opción mejor y más completa: alternar si tenemos cerca de nuestro entorno ambas opciones, o sino, la posibilidad de viajar con el fin de dirigirnos un día a la playa,  otro día al campo o a la montaña.



Son entornos fascinantes ambos para disfrutar del aire libre, por lo que resulta interesante, saludable y recomendable perderse unos días lejos de la  llamada “civilización” que impone cada ciudad con su rutina diaria, habitual y repetitiva que llevamos cada uno de nosotros en nuestras vidas durante el  año.



Ni qué decir de todas las justificaciones y defensas de la actual estación: vacaciones, buen tiempo, playa, mar, descanso ,familia, buena temperatura, actividades al aire libre, actividades de ocio, relax, parada, campo, río, amigos, sol, familia,…



El medio ambiente nos da un respiro en nuestra vida, la hace más saludable, necesitamos el medio ambiente para encontrar el equilibrio y el bienestar en nuestro cuerpo y en nuestra mente, ya que la naturaleza nos proporciona aspectos que la vida cotidiana no nos ofrece, tales como la  tranquilidad de la naturaleza, espacios abiertos, naturales y diferentes, ambiente distendido, cambio, otro ritmo, y desempeña funciones tales como la desconexión con las tareas y actividades habituales tanto laborales, domésticas como rutinarias, y una mejor conexión con uno mismo y con los demás, además de relax, descanso y paz, todas ellas cuestiones imprescindibles  para nuestra salud física y mental.
  
Un poco de música para el verano

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Fuente de los vídeos musicales: YouTube

sábado, 18 de julio de 2015

STRESS, WHAT´S THAT? 
Entre numerosos estudios realizados sobre los estilos de vida, hábitos y costumbres adquiridos de las personas en nuestra sociedad caracterizada  por  el rápido ritmo de vida, aparece la palabra estrés como uno de sus peores y mayores enemigos.



Dicen que ante una situación compleja a la que tenemos que enfrentarnos, nuestro organismo genera una hormona llamada cortisol, que es normal y hasta necesaria para dar una respuesta adecuada. Sin embargo, cuando la situación nos produce un alto nivel de desconcentración, de sensaciones y emociones negativas, se convierte en “estrés malo”, es decir, en otras cuestiones, que podemos dar el nombre de  miedo, ansiedad o pánico, cuestiones que se escapan al control personal.



Esa sensación de prisa, de ocupación completa durante el día, de deber continuo, de tener que hacer algo porque sí de modo obligado por motivos externos que no propios,  tanto por presiones puntuales como habituales, como por situaciones a las que queramos o no nos tenemos que enfrentar, pese a no ser de nuestro gusto y elección, son percepciones diarias o extraordinarias que pueden bastante bien definir el estrés.



Gran parte de la causa se debe a las obligaciones que el trabajo demanda y exige, las que tenemos en el hogar y las que seguramente generamos nosotros mismos sin necesidad, determinados retos, metas y situaciones concretas de la vida que debemos hacer frente queramos o no, y entre ellas, también se pueden encontrar aquellas que la tiranía de la sociedad nos impone, es decir, cánones de belleza, metas a alcanzar, estatus social y económico, forma de la felicidad,  actitudes y aptitudes socialmente aceptadas y aceptables a un determinado grupo al que se pertenece,…



Todas estas cuestiones las vamos adquiriendo paulatinamente desde pequeños y, las sentimos en gran medida desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, ya que, muchas veces,  como autómatas reproducimos los mismos movimientos cada día sin pararnos a pensar en variar, alternar o cambiar alguno de ellos gracias a la utilización de  ese herramienta que se llama imaginación.



Al final, nuestra vida se convierte en  una completa rutina,  parece que nos llevan y que nosotros no marcamos nuestro propio camino ni somos dueños de nuestras vidas ni de nuestras decisiones.



Así que mejor decimos,  ¡stress out!

Muévete más contra el estrés...

Juega al balón


   
Salta



Anda en bicicleta


Juega al aro


Corre



Juega con la cuerda




Juega y juega




Juega al corro



Juega en el agua



Juega con los sacos



 Fuente de las imágenes: Google Imágenes





  Disfrutamos del video musical de Youtube titulado Are you with me de Lost frequencies entre los sonidos de este verano 2015.