Fuente: Google ,Revista Welldone
Si tuviéramos que elegir entre las cuatro
estaciones del año, la respuesta sería sencilla y rápida,
la mayoría de nosotros elegiríamos el verano. Esta estación del año significa básicamente buen tiempo, además, de todo lo que conlleva,
como la posibilidad de disfrutar de unas merecidas y necesarias vacaciones,
desconectar del ajetreo diario, olvidar horarios, planes de trabajo, junto a
tareas y responsabilidades.
El verano nos ofrece la posibilidad de acercarnos a
la naturaleza y de contemplar todos sus elementos. Este calor, que se instala en el medio
ambiente y que disfrutamos durante unas cuantas semanas al año, es el verdadero
protagonista del verano. Aunque, ya sabemos que no hay nada perfecto, ya que vienen incluidas las olas de calor con su
calor sofocante.
Este buen tiempo atmosférico a lo largo de todo un
largo, luminoso y veraniego día en general, viene acompañado de
la buena temperatura, tanto exterior como del mar, de cielos azules y
despejados de nubes, de un sol de amarillo
radiante, de un paseo por arenas finas de color beige con leves ondas,
de un helado con sabor a vainilla ,de
una luna blanca y brillante rodeada de estrellas en noches agradables, y logran que digas que no quieres que se acabe el verano, y que
entre las cuatro estaciones, elijas, si pudieras, la veraniega.
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