Fuente: Google Imágenes
Mientras
el medio ambiente nos va anunciado un duro y frío invierno nosotros decimos
adiós a este año que acaba reuniéndonos en familia para celebrar juntos las
fiestas de la Navidad.
Allí
afuera, con la gran bajada de temperatura
marcada en los termómetros nos obliga a abrigarnos más de lo habitual y
nos colocamos los guantes, gorros y bufandas del año pasado rescatados en el armario. El fuerte viento mueve
con fuerza el oleaje en la costa, y sopla bruscamente moviendo aquellas ramas
de los árboles que se quedaron con sus hojas perennes y aquellas otras ramas peladas de
sus hojas ya caducas. Así pues, este tiempo nos
anima a posponer para otro día aquel paseo que teníamos pensado dar, ya
que la incesante lluvia nos invita a sacar los paraguas, eso sí, con el permiso
del viento, y la anunciada nieve, se asoma en las cumbres blancas de las
montañas cercanas, y hacen que el medio ambiente invernal sea cada vez más y
más frío.
Aquí adentro,
en cada una de nuestras casas, las personas más abrigadas que nunca, encendemos
la calefacción, preparamos las comidas y platos correspondientes y nos
reunimos alrededor de la misma mesa que ya está preparada para compartir estos
momentos de final de año.
Algo se
muere en el alma, cuando un amigo se va, dice la canción, y la parte más niña
de mí se pregunta, ¿qué se muere cuando es
un padre el que se va justo antes de la Navidad?...
A mis padres
De ella,
la paz,
la tranquilidad y la armonía.
De él,
la
fuerza, el carácter y el valor.
De los
dos,
la relación
con el pueblo y sus gentes.
En mí,
estáis los
dos muy cerca de mi corazón.
m.f.b. 29 marzo 2011
Fuente: You Tube.
