Los primeros rayos del día se reflejan en las aguas
de la bahía mientras la ciudad va poco a
poco despertando en las primeras horas de la mañana. Las luces de las farolas,
que dan visibilidad a sus calles en la
oscuridad de la noche, se van apagando para dar paso a la luz natural del día.
Al
igual que sucede en todas las ciudades, pequeñas localidades y pueblos, el silencio es sustituido poco a poco por los
sonidos y ruidos habituales producidos por el movimiento de las actividades de
sus gentes en el día a día.
Los motores de los autobuses municipales, coches y
otros vehículos, van rompiendo ese silencio. Las personas acuden presurosas a su lugar de
trabajo. Los organismos, entidades, servicios públicos y demás, comienzan su
funcionamiento. Y las puertas de los
comercios estarán pronto abiertas a los clientes. La ciudad se ha puesto en
marcha ya.
Fuente: Google Imágenes.
QUEREMOS MÁS
- Zonas de césped, parques y árboles para pasear y realizar actividades deportivas.
- Espacios abiertos de reuniones, actuaciones y representaciones enfocadas al ocio, la cultura y el arte.
- Bicicletas para moverse por la ciudad en el día a día.
- Amabilidad en la relación entre las personas.
- Participación ciudadana en el reciclaje y reutilizaje.
- Programas medioambientales desde todos los ámbitos: educación, sanidad, medios de comunicación, ayuntamiento, jurídicos, empresas y pymes,…
- Información sobre hábitos saludables como la actividad mental y la física, la alimentación, el ocio y el descanso.
- Ética como base de nuestras relaciones y desarrollo de la cultura emocional.
- Empatía con los demás: capacidad de escucha, acogida al que viene, solidaridad con el que sufre.
QUEREMOS MENOS
- Ruidos, olor al humo de los tubos de escape, atascos a las horas puntas de los coches.
- Estrés por el trabajo, los horarios, las responsabilidades, los imprevistos y la combinación de tareas.
- Desidia institucional en relación al medio ambiente y a la adquisición de hábitos saludables.
- Energías no renovables como el petróleo que contaminan el entorno.
- Cultura del ocio centrada en el alcohol y el tabaco como modo de relación social.
- Individualismo frente a la cooperación y la colaboración.
- Importancia a valores y principios como el dinero, el éxito, el status social.